miércoles, 31 de agosto de 2011

¿Qué hacías tú cuándo... (II)?



SÉPTIMA COPA DE EUROPA DEL REAL MADRID (20/05/1998)

  Nada menos que 13 años han pasado ya desde aquel mítico momento en el que Pedja Mijatovic atrapa un rechace en el área pequeña de la Juve después de un zambombazo de Roberto Carlos, recorta a Peruzzi y después de un segundo de suspense que se hizo eterno, introdujo la pelota en las mallas del equipo blanquinegro para dar al Madrid el momento de mayor gloria de su historia reciente. La gente que tenga menos de 20 años no es posible que tenga almacenado este recuerdo en sus memorias, pero a mí me sigue pareciendo que fue ayer.



Sé que puede parecer una comparación rayando en lo sacrílego, pero si examino detalladamente mis emociones sobre ese momento, creo estar seguro al afirmar que la alegría o la exaltación que tuve aquel día fue mayor que cuando España ganó el Mundial (no sé si alguno de los lectores ha tenido la misma sensación que yo). Supongo que se debe a que era más joven, o al no haber visto nunca nada parecido (en el caso de España teníamos muy reciente la Eurocopa). En fin, el caso es que fue así.

Yo había vivido ya cosas muy intensas como aficionado madridista, las Copas de la UEFA de mitad de los 80, con los partidos míticos y remontadas ante: Anderlecht, Borussia Mönchengladbach, Inter de Milán,..., las 5 ligas seguidas de la Quinta del Buitre, la Copa de Europa del 88 eliminando a Napoles, Oporto y Bayern,...

Todo eso estaba muy bien, pero un equipo como el Madrid tenía una deuda pendiente con la Copa de Europa, cuando parecía que se empezaba a poner más tiro, a finales de los 80, apareció el mítico Milán de Sacchi, Van Basten, Gullit, .. y todo a la porra

Especialmente duro fue la temporada 87/88, los dieciseisavos contra el entonces poderoso Nápoles de Maradona (en el Bernabéu a puerta cerrada), los octavos contra el campeón de la anterior edición, el Oporto de Madjer (los más frikis recordaréis el fabuloso partido de vuelta en Portugal de Llorente, al más puro estilo Gento), los cuartos contra el Bayern de Matthaus y remontada en el Bernabéu y las semifinales, que parecías relativamente asequibles contra el posteriormente Campeón PSV Eindhoven. Partido controlado en el Bernabeu con un 1-0 temprano y sorpresa en el empate en una jugada aislada. El Madrd se pusó nrevioso y paser de tener 60 minutos por delante no consiguió volver a marcar. En la vuelta un PSV encerrado y un Madrid al acoso y derribo que no pudo hacer un gol de milagro y 0-0. A casa por el doble valor de los goles. Recuerdo una chilena de Hugo al poste cuando quedaban 5 minutos y una bronce de Míchel al árbitro en cuanto acabó el partido



Por lo tanto, lo más que había vivido yo era una semifinal de Copa de Europa, de infame recuerdo. Todo esto era un bagaje decepcionante para el que se suponía que era, y es, el Rey de la historia de las Copas de Europa

Hasta que llego el año 1998. Recuerdo los nervios de los días previos, toda la prensa martilleando con que el Madrid llevaba 32 años sin ganar "su" Copa de Europa, gente de mi entorno diciendo "llevaba 32 años esperando este momento", cuando todos éramos bastante más jóvenes que ese número de años. El día de la final amanecí ya inquieto, no se hablaba de otra cosa en la Universidad, nerviosos, esperando a que llegara la tarde y la fatídica hora de las 20:45. Quedamos a verlo en casa de Marco, en Pozuelo; en el viaje desde Madrid ya se veía la ciudad colapsada de coches con banderas, tocando el claxon,... Supongo que era norma generalizada en España, porque David, un amigo de Burgos me contaba hace poco que nunca vio tanta gente reunida en torno a una plaza de esa ciudad.

Y llegó la hora del partido, muchos nervios, partido bastante malo, trabado, igualdad general con el Madrid ganando ligeramente a los puntos. Empezó la segunda parte hasta que llegó la jugada, en el minuto 66, que todos tenemos grabados es la retina:

Centro de Panucci desde la zona de corner hacia el área, Raúl y un defensa de la Juve están a punto de llegar pero no la tocan, el centro cómo iba con rosca llega botando mansamente a la esquina del borde del área donde se encuentra Roberto Carlos listo para fusilar; trallazo del brasileño con su potentísima zurda que se empotra en un defensa dejando el balón muerto dentro del área pequeña, allí aparece todo pillo Mijatovic que quiebra en un segudo a Peruzzi y queda encarado a la portería (esos instantes donde le regatea y todavía no ha disparado se me hicieron eternos) para meter el gol que le metería en todas las enciclopedias y el gol más importante de la historia moderna del Real Madrid (amago de 'gallo' de J.A. de la Casa incluido)




Desde entonces hasta el final, no escuchamos nada del partido, pusimos inmediatamente la radio y a sufrir, con el griterío que emitíamos todos ya no escuchábamos nada, salvo la voz desgarrada de Gaspar Rosety pidiendo, por favor, por sus hijas, que se acabase ya el partido. Fueron poco más de 20 minutos, pero a mí se me hizo eterno.

En cuanto pitó el arbitro el desbarajuste fue importante, sólo se oían gritos y cánticos. Bajamos en coche a Madrid y tardamos una eternidad por la cantidad de tráfico que había. En el camino nos íbamos pasando banderas con otros coches y parando para hacer bailecitos.

El centro de Madrid estaba colapsado, pero no hablo de la zona de Cibeles, hablo por ejemplo, de la zona de Alonso Martínez donde fuimos nosotros, estar en la calle era casi como estar en el metro

Desfase total como no había visto en mi vida y yo, acabé en la sala Sol agarrado a un andaluz que llevaba una bandera del Betis (ya que la victoria del Madrid hacía que ellos entrasen en Europa al año siguiente).

Fue una Copa de Europa ganada por el trabajo de todo el equipo.

Y vosotros, ¿cómo lo vivisteis?